El huevo, procedente de las gallinas, posee muchas proteínas de alta calidad, que permiten una rápida absorción en el organismo.
Este pequeño amigo, contiene en su centro vitaminas de los grupos A y B y minerales como el hierro. Es en la yema donde se encuentra la mayor concentración de grasas, proteínas, hierro, azufre y vitaminas A, B, D y E. Pero sin embargo, hay que tener cuidado a la hora de comer huevos, ya que es alto en colesterol.
Siempre hay que intentar cocer los huevos, para aprovechar mejor la clara de los mismos y sobretodo evitar enfermedades como la salmonella. Se lo puede hervir, escalfar, asar, hornear o freir. Y siempre, luego de una cocción es necesario (si no se va a ingerir en el momento) mantener los huevos en el frio del frigorífico y consumirlos antes de las 24 horas.
La ingesta recomendada de huevos a la semana es de 3 a 5 unidades. Sin embargo, si se tienen problemas de colesterol es mejor si se reduce si consumo a 2 o 3 unidades, o 2 a 3 yemas y 4 a 5 claras semanales.
El huevo, al poseer tantas proteínas, es ideal para niños y ancianos, sumado a que su digestión y masticación es una tarea muy sencilla.