Como hemos dicho en cierta oportunidad el yogur es una alimento probiotico, que contiene grandes beneficios para la salud. Esto se debe a la presencia de los microorganismos vivos que actúan en la flora intestinal bacteriana provocando efectos saludables, llamado el efecto Bifidus.
Es por ello que la ingesta periódica de Yogur favorece al desarrollo de las funciones intestinales, ademas de que protege todo el sistema de manera completa.
Es sabido que este alimento ha sido utilizado desde los comienzos de la humanidad como base alimenticia y gracias a él es que hoy disfrutamos de una amplia variedad de platos y comidas exquisitas alrededor del mundo. El contenido de Calcio que posee el yogur representa uno de los depósitos mas ricos, puesto que representa el principal formador de huesos del cuerpo, evitando de esta manera la famosa osteoporosis.
Ademas el yogur, gracias a su textura cremosa y semi blanda, es ideal para poder acompañarlo con frutas, cereales, y todo tipo de comidas, obteniendo de esta manera un alimento nutritivo, energético y saludable.
Para poder preparar yogur de forma casera lo único que se necesita es: 1 bote pequeño de yogur natural o de sabor de los de 150 gramos- 1 Litro de leche- 20 gramos de azúcar blanca.
Para comenzar a realizar el riquísimo yogur sera necesario hervir la leche y dejar enfriar hasta que alcance un punto de temperatura media o templada (los 40 o 45 grados). Luego se lo vuelca en un recipiente que debiera ser de barro o vidrio (nunca de metal) y se le agrega el pequeño bote de yogur natural más el azúcar.
Se revuelve bien para que se disuelva todo y a continuación se tapa el recipiente con una tapa o una toalla limpia y se lo deja reposar entre 7 a 12 horas, dependiendo del ambiente. Finalmente pasado este periodo, al levantar la toalla, deberíamos obtener un litro de yogur listo para conservar en la nevera.
